Cañas Fritas de O Carballiño
Las Cañas Fritas de O Carballiño son unas cañas rellenas de crema de lo más tradicional en la localidad de O Carballiño, en la provincia de Orense . Se trata de un dulce que según parece, empezaron a prepararlo en los años 1950, y ha continuado preparándose hasta el día de hoy. Las cañas de crema se preparan en varias regiones españolas , aunque cada región tiene su forma de prepararla.
Ingredientes
Para la masa
350 gr de harina de fuerza.
100 ml de aceite de oliva virgen extra suave.
125 ml de agua tibia.
1 pizca de sal.
La ralladura de medio limón.
Un chorrito de vino dulce (Oporto).
Para freír
Aceite de oliva virgen extra suave.
Crema pastelera
4 yemas de huevo.
100 gr de azúcar.
50 gr de almidón de maíz.
500 ml de leche entera.
1 vaina de vainilla.
1 rama de canela.
1 limón.
Para rebozar las cañas
Azúcar.
Canela en polvo.
Preparación
Para las cañas
En un bol grande pondremos 300 gr harina de fuerza, dejando 50 gr para ir engordando la masa.
Lavaremos el limón, lo secaremos, rallaremos aproximadamente la mitad, y añadiremos dicha ralladura al bol de la harina.
En el centro del bol, prepararemos un hoyo e introduciremos el agua tibia y un chorrito de vino dulce.
Batiremos con una cuchara de madera desde el centro hacia afuera e iremos mezclando poco a poco con la harina.
Añadiremos el aceite y la pizca de sal y seguiremos removiendo lo que empezará a ser la masa.
Por ahora será una mezcla pegajosa pero firme, una masa que no se pegue a las manos.
Prepararemos la zona donde vayamos a amasar, por ejemplo la encimera de la cocina es perfecta.
Llenaremos la zona de la encimera de harina, sacaremos la masa del bol y empezaremos a trabajar la masa con las manos.
Poco a poco podremos manipular la masa con más rapidez, se irá quedando elástica y homogénea, proceso que tardara unos 10 minutos.
Iremos dando forma de bola a la masa.
Meteremos la masa en un bol, la taparemos con un trapo de algodón durante una hora y dejaremos que repose en la nevera.
Al cabo de esa hora, sacaremos la masa de la nevera y la extenderemos por la encimera con la ayuda de un rodillo, previamente espolvoreada de harina.
A medida que estiremos la masa, iremos dándole la vuelta si es necesario hasta que tenga 1 cm de grosor aproximadamente.
Cortaremos la masa en tiras de unos 4 o 5 mm de ancho más o menos, y de longitud, tan largas como queramos que sean nuestras cañas.
Cogeremos un cilindro metálico y enrollaremos la masa desde la base hasta terminar la tira.
Haremos lo mismo hasta terminar con las tiras de masa.
Para la crema pastelera
Lavaremos muy bien el limón y pelamos su piel de manera fina, sin mucho blanco que luego nos amargue el postre.
Abriremos la vaina de vainilla y sacaremos las semillas, que reservaremos para añadir más tarde a la leche.
Calentaremos la leche a fuego medio casi hasta el punto de ebullición, en cuyo momento retiraremos del fuego.
Añadiremos las semillas de vainilla, la piel del limón y por último la rama de canela.
Dejaremos todo en reposo durante 5 minutos mientras batimos los huevos.
Separaremos las yemas de las claras y las pondremos en un bol con el azúcar.
Batiremos enérgicamente con una batidora eléctrica o unas varillas hasta lograr una mezcla espumosa.
Añadiremos el almidón de maíz al bol que contiene la crema de yemas y azúcar.
Podremos ayudarnos con un poco de leche calliente para que se mezcle mejor.
Batiremos todo muy bien.
Calentaremos la leche de nuevo a temperatura media, durante unos 10 minutos con la vainilla, la piel de limón y la canela.
Después de la cocción pasaremos por un colador para eliminar impurezas.
Pondremos la cazuela con la leche a fuego lento.
Añadiremos la mezcla de crema de huevo, azúcar y almidón de maíz.
Removeremos continuamente con unas varillas sin que se formen grumos y cuidando que nunca llegue a hervir.
Cuando empiece a espesar retiraremos del fuego y continuaremos removiendo un minuto más.
Tenemos que tener en cuenta que aunque la crema esté un poco líquida quedará más espesa cuando se enfríe.
Llenaremos una manga pastelera, dejaremos que repose 1/2 hora y luego la guardaremos en la nevera hasta que enfríe, reservando para rellenar las cañas fritas.
Para freír las cañas
Pondremos una sartén con aceite y calentaremos a fuego medio.
Freiremos las cañas por todos los lados hasta que estén doradas, ayudándonos de un tenedor para ir dando la vuelta a la caña.
Retiraremos a un plato con papel de cocina absorbente para retirar el exceso de aceite.
Retiraremos el canutillo de aluminio justo antes de rellenarlo, así nos quedará la forma perfecta, teniendo cuidado para no quemarnos.
Relleno de las cañas fritas
Llenaremos un recipiente ancho con azúcar y canela en polvo (unas dos cucharaditas de canela en polvo por cada 100 gr de azúcar) y mezclaremos bien con un tenedor.
Rebozaremos las cañas fritas en esa mezcla, que se impregnen bien.
Rellenaremos de crema con la manga pastelera por ambos huecos hasta que queden repletos, siempre justo antes de servir para que no se ablanden las cañas.