Frixuelos Asturianos
Aunque no se sabe gran cosa de su origen, se cree que podrían haber comenzado a prepararse cuando la humanidad empezó a alimentarse con harina , ya que es su elemento principal, junto a la leche y los huevos . La palabra aparece en el Antiguo Testamento de la Biblia “Si la oblación fuera de frisuelos fritos en sartén, será de flor de harina amasada con aceite, sin levadura” y Francisco Martínez Montiño, cocinero real de “los Felipes” -ocupó su puesto desde el reinado del II hasta el del IV-, incluyó en su libro de 1611 Arte de Cozina, Pasteleria, Vizcocheria y Conserveria una receta llamada “fruta de frisuelos”, que más o menos tiene que ver con lo que hoy se conoce. Son dos de las referencias más antiguas.
Ingredientes
200 gr. harina de trigo.
4 huevos.
500 ml. leche entera.
La ralladura 1 limón.
1 cda. coñac o de anís.
2 cdas de azúcar.
Una pizca de sal.
Azúcar para espolvorear.
Aceite de oliva virgen extra suave.
Preparación de la crema de los frixuelos
En un bol batiremos los huevos y añadiremos las dos cucharadas de azúcar. Continuaremos batiendo hasta que este se haya integrado.
Incorporaremos la cucharada de coñac o anís, la leche, una pizca de sal y la ralladura de limón. Volveremos a batir para mezclar bien los ingredientes.
Añadiremos la harina, poco a poco, al tiempo que seguimos batiendo con la ayuda de unas varillas.
Dejaremos la masa en reposo durante unos 30 minutos. Así conseguiremos que la harina abra, y nos quede una textura como de crema ligera.
La cantidad de frixuelos resultante dependerá del tamaño de la sartén que vayamos a utilizar.
Añadiremos una gota de aceite a la sartén y, con un papel de cocina, lo extenderemos por toda la superficie de la base.
Con una gotita es suficiente, sólo tenemos que cubrir la superficie con una finísima capa.
No es necesario una crepera, sólo una sartén normal que sea antiadherente, si no lo es, no podréis hacer los frixuelos porque se romperán al darles la vuelta.
Preparación final de los frixuelos y presentación
Cuando la sartén esté caliente añadiremos una porción de la mezcla e, inclinando la sartén haremos que cubra toda la superficie de la base de la sartén.
La cantidad para una sartén pequeña será, más o menos, un poco más de la mitad del volumen de un cucharón de cocina.
Dejaremos a temperatura medio alta para que se vaya haciendo el frixuelo.
Cuando veamos que los bordes empiecen a despegarse o tostarse, le daremos la vuelta y dejaremos que se cocine 30 o 40 segundos más.
A medida que los vayamos preparando veremos el punto en el que está listo de forma muy fácil.
Iremos colocando los frixuelos en un plato y espolvoreando con azúcar a medida que los vamos haciendo.
Colocaremos unos sobre otros.
Repetiremos la operación, mojando la sartén con una nueva gota de aceite cada vez que pongamos un nuevo frixuelo.
La forma tradicional de comerlos es enrollándolos y es aconsejable que estén calientes.
Además, también se pueden rellenar con los productos que más nos gusten.